Grandes Libros
El programa de los Grandes Libros es una recuperación de las actividades que han hecho digna a la historia: la lectura, la conversación, la adquisición crítica y transmisión del conocimiento y el saber.
Cualquier apuesta es ínfima ante el descomunal volumen de saberes y creaciones de la historia humana.
El proyecto The Great Books
Por lo pronto, como punto de inicio, nuestros grupos y clubes de lectura siguen de cerca el gran proyecto de Mortimer Adler, Robert Hutchins y otros: The Great Books of the Western World. Y el programa de conversación y lectura que se ayuda de The Great Conversation.
Nos entusiasman varias cosas:
Su brevedad: apostar por una línea de guía que cuenta con apenas 56 volúmenes (o 60, en su segunda edición).
Una perspectiva a la vez humilde y ambiciosísima. No es una selección de los mejores libros sino de aquéllos que atan los cabos de la línea que acompaña a la civilización occidental.
La conversación. Una sociedad que cultiva el arte y la disciplina de la conversación no es pasto de las tiranías. Y, sobre todo, el sentido de la vida en común no es el de llegar a un puerto de destino final sino hacer más rico, más ancho el viaje; es decir: la conversación y la convivencia.
El proyecto de Adler y Hutchins no confunde el saber con los títulos o los grados. No es necesario tener ninguna suerte de diploma o credencial para aprender, para saber o preguntar, ni tampoco es viable una sociedad que establezca niveles y jerarquías para entablar una conversación que nos haga más libres.
La lengua española lleva décadas, si no un par de siglos de retraso. En el proyecto de The Great Books of the Western World hay solamente un libro de lengua española: el Quijote. desde luego, debiera haber otros. Pero nuestra tradición ha padecido una suerte de terror a la crítica, a la edición, a la integridad de unas obras, admirables por supuesto, pero que han ido a dar a un espacio imaginario que mezcla una supuesta sacralidad con la intangibilidad.
El camino es larguísimo. De hecho, no tiene final y cada poco se añaden nuevas obras maestras a una tradición que no espera y continuará su viaje.
Nunca hemos contado con un proyecto de canon que cumpla con los dos requisitos de la tradición activa y viva: trazar una línea en el tiempo, que guía nuestro común viaje a lo largo de las civilizaciones, y que sea tan breve como para recorrerse en el lapso de un vida. El secreto consiste en dejar a un lado la ambición de saber, para dar paso a la costumbre de buscar, preguntar, formar objeciones y respuestas inteligentes: leer, conversar, seguir leyendo.
Linkoteca de Great Books
Bibliotecas:
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