De unico vocationis modo
Bartolomé de las Casas, Del único modo de atraer a todos los pueblos a la verdadera religión
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Ginés de Sepulveda (izquierda) y Bartolomé de las Casas (derecha) quienes protagonizaron la Controversia de Valladolid a favor y en contra de la esclavitud de los indios (respectivamente). Imágenes recuperadas de https://es.wikipedia.org/wiki/Junta_de_Valladolid
1) Acerca de Las Casas.
Las Casas es un español genuino del siglo XVI, uno de esos hombres que, independientemente de si estamos de acuerdo o no con sus postulados, es un tema universal, «una cantera inagotable del que cada cual puede extraer su propia piedra y hacer la escultura pertinente», como diría Ortega y Gasset1 . Esto hace que Las Casas sea un personaje del que todo el mundo cree saber, pero pocos conocen de verdad.
{La evangelización en el De unico vocationis modo de Fray Bartolomé de las Casas. Ramón Valdivia Giménez Director y Profesor del CET de Sevilla. Anuario de Historia de la Iglesia Andaluza. Volumen VI]
Nació en Sevilla en el año de 1474, murió en el monasterio en Atocha, Madrid, en 1566. Obispo de Chiapas, padre y protector de los indios, a quien deben éstos su libertad y su consideración como hombres. Su obra, alegato exaltado en favor de los aborígenes, está impregnada de nobles esencias cristianas y un acendrado optimismo en los valores humanos.
Escribió numerosas y dilatadas obras entre las que sobresalen la Historia de las Indias (1502-1552), la Apologética Historia de las Indias (terminada en 1552); Del único modo de atraer a todos los pueblos a la verdadera religión (1536); Tratado comprobatorio del Imperio soberano y principado universal que los Reyes de Castilla y León tienen sobre las Indias; Brevísima relación de la destrucción de las Indias, (1542), y muchos otros tratados de esencia jurídica destinados a la defensa de los naturales.
[Ernesto de la Torre en Lecturas históricas mexicanas]
En la época en que Las Casas compuso este tratado era ya uno de los hombres más experimenta dos en los asuntos del Nuevo Mundo. Habiendo llegado a La Española en 1502 formando parte de la primera gran emigración de españoles a las tierras recién conquistadas, había tenido indios en encomienda, había renunciado a ella en 1514 porque consideraba el sistema injusto, y en 1515 había comenzado su carrera como protector de los indios, que continuó 'hasta su muerte en 1566.
[Lewis Hanke en la introducción a la edición del FCE]
2) Influencia
El tratado--que ahora se imprime por primera vez es considerado como una de las tres grandes obras de Fr. Bartolomé de Las Casas, y dará gloria a su nombre mientras se estudie la conquista de América por los españoles. Las ideas principales de esta disertación sobre el único método verdadero para la predicación de la fe han sido conocidas hace mucho tiempo a través del excelente resumen hecho por Antonio de Remesal en la segunda década del siglo XVI pero el manuscrito mismo se creía perdido.
[…]
Pocos escritos han tenido en la historia del mundo un efecto tan inmediato como este denso tratado, recargado con cientos de citas, puesto que condujo al famoso experimento de la Vera Paz en Guatemala…
[Lewis Hanke en la introducción a la edición del FCE]
Un hecho relevante en la vida del sevillano De Las Casas y que fue de suma importancia para poner sobre la mesa argumentos sólidos que hicieran validos la defensa de los indios fue la Controversia de Valladolid, realizada en el año de 1550 y 1551…
Ginés de Sepúlveda defendía que la guerra que los españoles llevaban al Nuevo mundo era una guerra justa, y acusaba a los indios de idolatras, y para él los indios eran inferiores y pertenecían por lo tanto a otra categoría, y para Las Casas los indios eras iguales a los españoles y deberían ser beneficiados teniendo un trato digno con ellos, un trato más humano.
Los argumentos de Sepúlveda estaban sostenidos en el mando de la evangelización, es decir del papa y del rey, y de Las Casas era demostrar la racionalidad de los indios a través de la civilización del indio…
Bartolomé de Las Casas por su parte, buscaba demostrar que la racionalidad del indio era igual a la de los europeos diciendo: “Pero vuestra reverencia, hermano Sepúlveda no interpreta bien a Aristóteles porque el habla de cuatro clases de bárbaros, y los indios, a los que yo conozco no son barbaros propiamente dichos, ósea, crueles y sin razón, sino que poseen razón suficiente y bien podían gobernarse por sus propios medios ¿P no hay razón en quienes han construido esos grandes templos que nos admiran? Y por su razón, hay que llevarlos a la civilización y a la fe de forma pacífica, y no a través de la guerra” (SOTO Domingo de, Controversias entre Bartolomé de Las Casas y Ginés de Sepúlveda, Editorial Maxtor, España, 2006, p.16)
[Texto de Víctor Alí González Calderón, Fray Bartolomé de las Casas y la defensa de los indígenas como seres racionales y libres]
3) Origen
[Esta obra] Está basada en el pensamiento jurídico, filosófico y moral y es fruto de una conferencia pronunciada en torno al curso de 1538-1539 como respuesta a la cuestión espiritual que Carlos V le había planteado a éste por la moralidad de la guerra contra los indios. […Vitoria] dividió la conferencia en tres partes: En la primera, se defendía las competencias del teólogo en esta cuestión ética, debido a las críticas por parte de los jueces que estaban recibiendo, puesto que lo consideraban un problema legal. La segunda parte de la Relección, se centra en los títulos ilegítimos que tienen los españoles en América y por los cuales si justifican su presencia en América se condenarán. El teólogo defenderá la común naturaleza humana de todas las personas, el derecho de los indios a ser dueños de sus tierras y la defensa de que la fe es libre, no siendo necesario predicarla por medio del uso de las armas. La tercera y última parte, a la cual se considera la más importante ya que en ella se postula el “derecho de gentes”, fundamentado en el derecho natural y humano y, del cual, posteriormente, nacerá en el derecho internacional, es decir, los principios que tenemos los seres humanos, por nuestra condición humana, lo que en nuestros días conocemos como derechos humanos
[Reseña de Lucía Montón Lozano Universidad de Salamanca: Relección sobre los indios. Francisco de Vitoria. Introducción y traducción de Ramón Hernández Martín OP, Salamanca, Fundación Salamanca Ciudad de Cultura y Saberes y los autores, 2017,109 pp.]
3) Aristotelismo novohispano
En efecto, puesto que se trata de la organización de la vida social, Las Casas recurre de nuevo a la autoridad de Aristóteles en su doctrina acerca de los requisitos o condiciones que deben concurrir en toda sociedad para que se la considere temporalmente perfecta. Esas condiciones se llenan si existen seis clases de ciudadanos: labradores, artesanos, guerreros, comerciantes, sacerdotes y gobernantes. Tal, pues, la armazón que le sirve a Las Casas para el examen que se propuso realizar; pero antes de proceder a mostrar que las sociedades indígenas cumplían con las seis condiciones enumeradas, advirtió que todas ellas presuponen una condición previa, a saber: la vida en comunidad, o sea que toda sociedad requiere la congregación de sus miembros en una ciudad. A este requisito previo· dedica, pues, su inmediata atención. Por último, es de advertir que en la aplicación de este esquema conceptual básico el P. Las Casas empleó el sistema de un recorrido geográfico al examinar cada uno de los requisitos indicados por Aristóteles.
[Edmundo O’Gorman en su introducción a “Los indios de México y Nueva España”: antología]
Esta sería una de las armas fundamentales de Las Casas contra el empleo del argumento aristotélico: los indios no son irracionales ni bárbaros en el grado que suponen quienes los llaman siervos por naturaleza. Es una calumnia nacida de la ignorancia o de la mala fe e interesado juicio de los informantes. Para combatir esta suposición de hecho, de la cual depende la aplicabilidad de la construcción aristotélica al caso de América, el camino más indicado es afirmar la razón del indio, su capacidad moral y política, su habilidad mecánica, la buena disposición y belleza de rostros y cuerpos, etc.
En el tratado De Unico Vocationis Modo dice Las Casas que hombres mundanos y ambiciosos aseguraron falsamente de las naciones indianas que estaban alejadas de tal manera de la razón común a todos los hombres que no eran capaces de gobernarse a sí mismas, sino que todas ellas necesitaban de tutores. Y llegaba a tanto la locura de estos hombres, que no tenían empacho en afirmar que los indios eran bestias o casi bestias…
Las Casas opone a los argumentos de los hombres mundanos y ambiciosos la idea de la capacidad de los indios. Muchísimos de éstos pueden hasta gobernar a los españoles, en la vida monástica, económica o política, y enseñarles buenas costumbres. Y más aún, pueden dominarlos con la razón natural, como dice el Filósofo hablando de griegos y bárbaros en el libro I de la Política (4). Es decir, fray Bartolomé afirma la habilidad del indio hasta un extremo que le permite invertir, contra los españoles, el argumento clásico.
[Silvio Zavala en Las Casas ante la Doctrina de la Servidumbre Natural; “Revista di la Universidad de Buenos Aires”, Tercera Época, Año II, Núm. i, Buenos Aires, Enero-Marzo, >944, pp. 45-58].
4) Visiones críticas del “Héroe de todos los indios”
En 1517, el P. Bartolomé de Las Casas tuvo mucha lástima de los indios que se extenuaban en los laboriosos infiernos de las minas de oro antillanas, y propuso al emperador Carlos V la importación de negros, que se extenuaron en los laboriosos infiernos de las minas de oro antillanas. A esa curiosa variación de un filántropo debemos infinitos hechos los bhies de Handy, el éxito logrado en París por el pintor doctor oriental D. Pedro Figari, la buena prosa cimarrona del también oriental D. Vicente Rossi…
Borges, 1934
El Las Casas virtuoso no es a la vez un difamador; el Las Casas estudioso no es a la vez un malicioso tergiversador de datos. Las Casas es un enfermo mental, es un paranoico que falsea necesaria e involuntariamente los datos de la realidad.
Menendez Pidal, 1963
Es totalmente erróneo creer que la sugestión hecha por Las Casas en 1516 para importar esclavos a las Indias fue la causa inicial de la esclavitud en el Nuevo Mundo; mucho antes de tal fecha y de la intervención de nuestro clérigo ya se había establecido este comercio humano […] El Protector Universal de Indios “es hoy el ídolo de los americanos”, según acertada expresión de L. A. Getino, como lo fue de los indios en el siglo XVI. La verdad y la justicia van abriéndose paso, de manera lenta pero firme, entre quienes le ignoraban o eran engañados por la propaganda interesada. Lamentamos únicamente que haya todavía quienes sigan aferrados a la “leyenda negra” y a la necesidad de verter su bilis y su odio sobre quien, desde el 17 de septiembre de 1517 y hasta la Eternidad, fue y seguirá siendo el Protector Universal de Indios por antonomasia.
Juan Comas, 1966
[Todos los textos de esta sección deben ser confrontados en Memorias de la Academia Mexicana de la Historia Correspondiente de la Real de Madrid. https://www.academiamh.com.mx/wp-content/uploads/2022/08/MEM_T25_1966EDIT_N3.pdf]